Archivo de la categoría: bravonel

LOS OLVIDOS DE BRAVONEL «Que ondas pues, que ondas pues, que ondas pues»

Armando Velarde Gaviño, fue otro de los compañeros de trabajo de Bravonel, se conocieron desde que llegó a la fábrica, pero fué mucho después que se hicieron amigos, aunque todos lo conocían por su nombre, su apodo se impuso, era de alegre carárter, muy activo siempre fue convocado a algún equipo cuando se hacían torneos de fútbol y la muchachada que más convivía con el le puso el mote de *El guasas» por su forma alocada de ser. Seguir leyendo LOS OLVIDOS DE BRAVONEL «Que ondas pues, que ondas pues, que ondas pues»

LOS OLVIDOS DE BRAVONEL «Bravonel por El Vado de San Pedro»

¿Cómo era el poblado del Vado por los 70s? Bravonel no puede precisarlo, sólo recuerda pocas calles al rededor de la plazuela: un cuadro de terreno limpio con algunos árboles en su contorno, unas bancas de madera y en la esquina de las dos calles principales un enorme árbol de tamarindo, allí sobre una mesa de madera, todos los sábados y domingos ponían un tocadiscos y los acetatos de 45 y 33 rpm, una caja de agujas de metal que se le ponían al brazo del aparato, que al viajar por los surcos del disco reproducía la música de los éxitos del momento y dos bocinas dispuestas en lo alto de una lata de madera, ampificaban la música por todas direcciones en todo el caserío invitando a bailar a la muchachada. Seguir leyendo LOS OLVIDOS DE BRAVONEL «Bravonel por El Vado de San Pedro»

LOS OLVIDOS DE BRAVONEL

«Jesús Bañuelos, el primo tapatío”

Corría la década de los 60s, el pueblo todavía con la neblina de la juventud, pocas calles empedradas, falto de iluminación, calles polvorientas en meses secos y lodosas en tiempo de lluvias.
Jesús era el hijo más grande de Eulalio Bañuelos y María Martínez, oriundos de Mexquitic, Jalisco y avecinados en la perla tapatía, Eulalio era el hermano menor de Pedro; padre de Bravonel. Seguir leyendo LOS OLVIDOS DE BRAVONEL

LOS OLVIDOS DE BRAVONEL

«Bravonel por los llanos de Juan Escutia»

Siempre que le toca «apearse» del autobús en la caseta de cobro de Ruíz, allá al poniente, enmarcado por el cerro de Peñas, las torres de la iglesia y el cerro de Ruiz, se ve el boulevard de Tijuanita y a mano izquierda una escuela técnica, un poco mas delante está el crucero de Juan Escutia, luego bordea la carretera lo que fué una enorme huerta de mangos y el llano por donde un mozalbete de trece años transitaba todas las tardes llevando dos cartones mantequeros atados a la parrilla de una bicicleta, llenos de pan para surtir la tienda de Don Trini que estaba casi enfrente de la cancha de basquet del poblado. Seguir leyendo LOS OLVIDOS DE BRAVONEL