Este jueves 14 de abril, por la noche, se llevó a cabo en la ciudad de Tuxpan lo que se da en llamar “El Rompimiento de la Feria”, pretexto con el cual salieron muchas personas a las calles donde desfilaron carros alegóricos y comparsas de jóvenes, para posteriormente participar en una borrachera colectiva, para lo cual se instalaron hieleras llenas de cerveza a lo largo del bulevar y el malecón.
Para que esto fuera el gran negocio para los organizadores del festejo, el ayuntamiento que encabeza el arquitecto José Luis “El Chapito” Tovar, mandó cerrar los depósitos de cerveza, por lo que se dieron casos de jóvenes que fueron reprimidos por la policía municipal porque llevaban cerveza de otro lado.
En este lugar, se puso en peligro la salud pública, pues hubo una gran aglomeración de personas de todas las edades, las cuales no utilizaron ninguna medida de prevención de contagio de Covid-19 y por si fuera poco, se tuvo presencia de mucha basura, aguas negras y muchos contaminantes.
El viernes por la mañana, de la calle Obregón a la Valerio Trujano, había toneladas de basura, aguas negras, vidrios rotos y muchos contaminantes, por lo que los carros fueron desviados para las calles Juan Escutia y Libertad, encontrando a su paso los conductores y pasajeros de esos vehículos, aguas hediondas que brotan del drenaje, basura, lodo y un panorama que evidencia que la actual autoridad municipal no ha podido con el paquete, que hay ingobernabilidad total y no se atiende ningún servicio básico, ya que se dice, que quienes en verdad mandan en este pueblo, son la esposa del alcalde, profesora Lizbeth Amparo Meza y uno de sus hermanos que está al frente de la Dirección de Seguridad Pública, los cuales ordenan y despiden a funcionarios que les estorban.
Ante este evidente desorden, la mayoría de los habitantes del municipio de Tuxpan desearían que se le revocara el mandato al presidente municipal José Luis Tovar Ruvalcaba, al que se dice le quedó muy grande el cargo. (FOMA).