DEL EDITOR: PAN Y CIRCO AL PUEBLO

arturo      Son muchos los miles de millones de pesos que gasta el IFE para llevar a cabo la actual campaña política, en la que vemos que se realizan costoso eventos con la única finalidad de atacar al candidato presidencial que va arriba en las encuestas de preferencias electorales, Andrés Manuel López Obrador, el que de manera astuta, saca ventaja a esa situación.

Es claro que en esta cívica jornada, nada tiene que hacer un sujeto pendenciero y torpe como es el candidato independiente Jaime Rodríguez, apodado “El Bronco”, además que es muy poco lo que abona el representante de la alianza “Todos por México”, José Antonio Meade, el que como funcionario federal de alto nivel, solo trajo mayor miseria y problemas a nuestro país.

Por lo anterior, en caso de una confrontación seria, se tendría que hacer un debate solamente entre Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya Cortez, este último de la alianza “Por México al Frente”, el que aún yendo en un ahora lejano segundo lugar, tiene capacidad para hacer buenas propuestas que ayuden a resolver la grave problemática que padecemos los mexicanos a quien gane la contienda electoral del domingo 1 de Julio próximo.

Y esto debe ser en el próximo debate, ya que en el de este domingo 20 de mayo, no sucedió nada, pues los ataques en montón en contra de Andrés Manuel son cosa cotidiana de los otros candidatos presidenciales, los que en cada aparición en público aprovechan para supuestamente denostarlo y tratar de bajarle el apoyo que tiene actualmente en el electorado.

Por su nula aportación en propuestas y estrategias para salir de la violencia, desempleo, miseria y grave crisis de corrupción que hubo en el debate dominical, muchos mexicanos consideramos que fue sumamente caro este evento televisivo, el que no logró siquiera el propósito de dar diversión a los frustrados televidentes que hubiéramos preferido presenciar un programa de “Chabelo”, el que si hacía disfrutar a la familia los fines de semana, esto antes que lo corrieran de la empresa Televisa.

De hecho ya hay ciudadanos que consideran que se debe hacer entender a los candidatos presidenciales que tienen que aprovechar los programas que a través de la televisión y de modernos medios digitales se hace llegar a todos los rincones del país para que muestren inteligencia con propuestas serias que sean factibles de llevar a la práctica y que beneficien a la mayoría de las familias mexicanas desde el primer momento que se lleven a la práctica.

Porque urge detener la ola de crímenes que se da en todo nuestro territorio nacional y para eso, solo ha sido Andrés Manuel quien propuso hace ya más de un mes, llevar a cabo una amnistía a los combatientes  de la decretada guerra contra el narcotráfico, la cual impuso de manera torpe el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, y le ha costado al país a la fecha, cientos de miles de muertos y desaparecidos.

Y es que los mexicanos queremos escuchar precisamente soluciones a la grave crisis que padecemos con tanta corrupción, violencia extrema, miseria, falta de empleo y todo eso que nos hace sufrir todos los días; que nos quiten el miedo de salir a la calle, de ser blanco de algún delito, incluso de que la misma autoridad nos agreda, robe, mate y desaparezca de la faz de este mundo.

La apreciación de infinidad de compatriotas es que en esta ocasión vimos a candidatos a la presidencia de la República evasivos, temerosos de exhibirse con declaraciones que los comprometiera, sobre todo con el gobierno imperialista yanqui, al que se le debe decir simplemente que de aquí en delante tendrá, por parte del gobierno mexicano, el mismo trato que él de a nuestro país y a nuestros compatriotas.

Ahora los mexicanos debemos exigir a los funcionarios del IFE que nos hagan saber cuánto nos costó este fallido evento, esto para que ya no se hagan en el futuro o se corrijan, pues se tiene la apreciación que este domingo nos salió caro el evento que no cumplió ni siquiera el que se diera diversión sana a las familias mexicanas, las que aguantan mejor la falta de pan con una sonrisa en los labios.

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